Trastornos emocionales: Una mirada desde el estudio de las adicciones.
Los trastornos afectivos, también llamados trastornos del ánimo, son un grupo de enfermedades mentales que impactan de forma importante y duradera en cómo se siente una persona. Desde mi experiencia como médico, he observado que los trastornos afectivos, especialmente cuando no son diagnosticados o tratados adecuadamente, pueden llevar a complicaciones severas, incluyendo el abuso de sustancias. En este artículo, abordaré los principales tipos de trastornos afectivos, su relación con la adicción, y los enfoques terapéuticos para su tratamiento.
Significado y tipos de problemas emocionales
Los trastornos afectivos son problemas de salud mental que se caracterizan por cambios importantes en cómo se siente una persona, como tristeza profunda, excesiva felicidad o una mezcla de ambos. Estos problemas afectan la habilidad de la persona para vivir una vida regular, causando dificultades en su relación con otras personas, en el trabajo y en su ámbito personal.
Los problemas emocionales más frecuentes son:
Trastorno depresivo mayor
Se distingue por sentirse triste o deprimido la mayor parte del tiempo, y por perder interés en cosas que antes le gustaban. Los signos son cansancio, dificultades para dormir, alteraciones en el hambre, poca confianza en uno mismo e ideas de hacerse daño.
Trastorno bipolar
Esta condición implica cambiar entre momentos de sentirse muy triste y momentos de sentirse muy emocionado o eufórico. En un episodio maníaco, una persona puede sentirse muy feliz, tener mucha energía, sentirse muy seguro de sí mismo y hacer cosas peligrosas. En la fase depresiva, los síntomas son parecidos a los de la depresión mayor.
Distimia
También conocida como trastorno depresivo persistente, se caracteriza por tener un estado de ánimo triste durante mucho tiempo, al menos dos años. Aunque los signos son menos graves que en la depresión mayor, duran mucho tiempo y pueden afectar mucho la calidad de vida de la persona.
Ciclotimia es una versión menos intensa del trastorno bipolar en la que la persona tiene cambios entre sentirse muy activa y una tristeza leve. Aunque los síntomas no son suficientes para ser considerados como episodios completos de manía o depresión mayor, pueden ser muy molestos y debilitantes con el paso del tiempo.
Problemas emocionales y adicción
La conexión entre los problemas emocionales y el consumo de drogas es complicada y va en ambas direcciones. A menudo, las personas con problemas emocionales usan alcohol u otras drogas para sentirse mejor. En algunas situaciones, el uso continuado de drogas puede empeorar los síntomas de un problema emocional.
Un aspecto importante de cómo los trastornos emocionales y la adicción están relacionados es la idea de automedicarse. Las personas que tienen síntomas de tristeza o exaltación a veces buscan consuelo en sustancias que les dan un alivio momentáneo. Por ejemplo, alguien con tristeza puede usar alcohol o pastillas para dormir para sentirse mejor y mejorar síntomas ansiosos. No obstante, esta sensación de alivio no dura mucho y a veces hace que los síntomas empeoren con el tiempo.
De la misma forma, las personas que tienen episodios de mucha energía y felicidad pueden usar drogas estimulantes como la cocaína o las anfetaminas para aumentar esos sentimientos, usar mucho estas sustancias puede hacer que te vuelvas dependiente de ellas. Dejar de usarlas de un momento a otro puede causar una depresión grave, lo que puede generar un ciclo peligroso de consumo excesivo y problemas emocionales más intensos.
El uso constante de drogas puede cambiar la comunicación química del cerebro y la estructura de las partes que controlan cómo nos sentimos. Especialmente, el consumo continuado de alcohol, opioides y drogas estimulantes puede cambiar los niveles de ciertas sustancias químicas en el cerebro, como la dopamina, la serotonina y la norepinefrina, que son importantes para controlar cómo nos sentimos.
Los opioides pueden hacer que te sientas feliz al principio, pero con el tiempo pueden causar que ya no sientas placer y te sientas deprimido. Esta reducción en la satisfacción natural puede provocar un patrón de consumo excesivo en el que la persona necesita más cantidad de la sustancia para sentir el mismo efecto emocional positivo.
Además, ciertas drogas que activan, como la cocaína y las anfetaminas, pueden causar episodios de mucha energía en personas con tendencia, empeorando el trastorno bipolar y llevando a comportamientos riesgosos o suicidas.
Identificación de los problemas emocionales
Identificar problemas emocionales en personas que abusan de drogas es difícil para los profesionales de la salud. Es complicado saber si los signos emocionales son causados por el consumo de drogas o forman parte de un problema emocional más profundo. A veces, es importante que el paciente deje de consumir ciertas sustancias por un tiempo para poder evaluar bien su estado de ánimo.
En torno al diagnóstico, se emplean normas médicas basadas en libros de clasificación, como el DSM-5, que da pautas concretas para los diferentes tipos de problemas emocionales. También es importante hacer preguntas sobre la salud, el uso de drogas, si hay antecedentes familiares de problemas emocionales y cuánto tiempo y qué tan fuertes son los síntomas de ánimo.
Manejo de los problemas emocionales en personas con adicciones
Para tratar los problemas emocionales en personas con adicciones, es necesario un enfoque que combine diferentes disciplinas y se ocupe tanto de los cambios de humor como del consumo de sustancias al mismo tiempo. Tratar cada problema por separado puede no ser efectivo, ya que a menudo uno afecta al otro.
Uso de medicamentos
El tratamiento con medicamentos para los problemas emocionales puede implicar el uso de antidepresivos, medicamentos para estabilizar el estado de ánimo y neurolépticos. No obstante, es importante elegir el tratamiento con precaución, ya que algunas de estas medicinas pueden tener efectos al mezclarse con drogas.
La terapia es muy importante para tratar los problemas emocionales en personas con adicciones. Los tratamientos más habituales son:
- La terapia cognitivo-conductual es muy útil para ayudar a las personas a reconocer y cambiar pensamientos negativos y comportamientos dañinos que mantienen problemas emocionales y el uso de drogas. En el tema de la adicción, la terapia cognitivo-conductual puede ayudar a las personas a aprender maneras de evitar volver a caer en la adicción y a controlar las situaciones que pueden provocarla.
- Terapia dialéctica conductual: Esta terapia es muy útil para personas con problemas emocionales y comportamientos impulsivos o autolesivos. Esta terapia te ayuda a aprender a controlar tus emociones y manejar el estrés, lo cual es muy importante para prevenir volver a caer en el consumo de drogas.
- Terapia en grupo y grupos de apoyo: Los grupos de apoyo, como alcohólicos anónimos (AA) o narcóticos anónimos (NA), ofrecen un lugar seguro donde las personas pueden hablar sobre sus vivencias y recibir ayuda de quienes están pasando por situaciones parecidas. Estos grupos también fomentan que cada persona sea responsable, lo cual es muy importante para recuperarse completamente con el tiempo.
Prevención y enseñanza
Evitar problemas emocionales en personas con adicciones necesita que tanto los pacientes como los profesionales de la salud estén más informados y educados. Es muy importante reconocer los signos tempranos de los problemas emocionales y tratar cualquier abuso de drogas desde el principio para evitar que estos problemas se vuelvan crónicos.
Los problemas emocionales son un gran problema para la salud mental y cuando se combinan con el uso de drogas, se vuelven aún más difíciles de tratar. Como médico especializado en tratar adicciones, es importante tratar ambos aspectos al mismo tiempo para ayudar a los pacientes a recuperarse de manera duradera y a mejorar su calidad de vida.
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Carlos Olmos MD
