Cuando una persona sufre de una adicción, no sólo afecta la manera en la que se desenvuelve en sus actividades cotidianas como la escuela o el trabajo, sino que también perturba sus relaciones personales, ya que sus seres queridos en general, y los miembros más cercanos de su familia como sus padres, hermanos, pareja sentimental o hijos en particular, resultan ser los más vulnerados.
Para las familias es muy complicado lidiar con una situación tan difícil, en la que uno de sus miembros está luchando constantemente contra una enfermedad que muchas veces lo controla, convirtiéndolo en una persona muy distinta, terca, dependiente e incluso violenta, de tal manera que se pone en peligro a sí misma y a todos los que la rodean.
Es por ello que en la mayoría de las veces son los miembros más allegados a la persona adicta quienes buscan la ayuda de Oceánica, pues la situación ha llegado al punto en el que no pueden lidiar solos con la adicción y sus consecuencias, por lo que acuden a nuestro centro de tratamiento para el alcoholismo, drogas y medicamentos, con la esperanza de que su familiar acceda a una institución con más de 25 años de servicio.
Por lo general, una persona adicta a sustancias dañinas o a cierto tipo de actividades como el juego o la codependencia, no acepta que tiene un problema y entre sus alegatos están el que lo puede controlar y dejar en cualquier momento, cuando en realidad esto no pasa así, la dependencia hacia la sensación de bienestar que buscan en el objeto de su adicción es mucho mayor que su propia voluntad.
Sin embargo, una de las principales características de las personas que tienen la enfermedad de la adicción es la de la negación, es decir, se les dificulta demasiado aceptar que hay un elemento externo que las controla y que las ha llevado a hacer cosas que conscientemente jamás hubieran llevado a cabo, como lastimar a sus seres queridos física y emocionalmente, por ejemplo.
Y es que no es nada fácil enfrentarse a la realidad, aceptar que existe un problema que ha sobrepasado sus capacidades físicas y mentales, la fuerza de voluntad se ve profundamente vulnerada cuando la ingesta de alcohol u otras sustancias es usada para cubrir las carencias emocionales o para evitar enfrentar las problemáticas del día a día.
El primer paso hacia la recuperación de una persona con una adicción es el de la aceptación, es por ello que en Oceánica brindamos la asesoría de uno de nuestros especialistas para que dirija una intervención, es decir, una reunión en la que los más allegados (familiares directos, amigos, pareja e hijos), se dirijan a la persona afectada de manera tranquila y respetuosa, el trabajo de nuestro terapeuta es el de guiar la discusión de manera ordenada, en la que cada uno de los presentes exponga su preocupación, así como los daños que le ha traído la adicción de su ser querido, en un ambiente de apoyo y amor.
Sin importar en qué parte de la república mexicana se encuentre el afectado, nuestros asesores viajarán hasta el lugar de residencia de la familia que solicitó los servicios de Oceánica. Una vez que la persona ha aceptado que tiene un problema que no puede controlar por sí misma, es hora de presentarle las opciones de tratamiento, una es el residencial (al internarse en nuestro centro de desintoxicación) y la otra es enfrentar su problemática sin ser internada.
Nosotros recomendamos ampliamente la primera opción, ya que lo que más necesitan nuestros pacientes es una atención personalizada las 24 horas del día, principalmente durante los primeros días de su estancia, que son en los que tendrán que lidiar con el síndrome de abstinencia, en el que su cuerpo se siente muy enfermo y ansioso por la pérdida del estímulo del objeto de su adicción.
Durante todos los días que dure el tratamiento para el alcoholismo y las demás adicciones, nuestros especialistas estarán en constante comunicación con los familiares aprobados por el paciente, con el fin de informarlos de cómo va el proceso y el estado de salud de su familiar, esto es de suma importancia, puesto que nuestra atención va dirigida al bienestar de las familias enteras, no sólo al de la persona que sufre de una adicción.
Lo más importante en el proceso de rehabilitación es que nuestros pacientes se sientan apoyados por sus familias, ya que son el pilar de toda organización social, de tal manera que mientras sientan el cariño de sus seres queridos más cercanos, podrán tener la fuerza y la voluntad para salir adelante y recuperarse de su enfermedad de manera más rápida.
Es necesario aclarar que tenemos un espacio especializado en las familias, conocido como Área de Familia, en el que los terapeutas del área les brindarán apoyo de manera directa y personalizada, según sea el caso de cada paciente. Dicho apoyo consiste en atención psicológica y emocional para los miembros más afectados por esta enfermedad, como lo suelen ser los hijos, las parejas, los padres y los que viven normalmente con el paciente.
Te invitamos a visitar nuestra página para más información y si necesitas atención especializada, uno de nuestros especialistas te podrá contactar a través del chat, o si lo prefieres, contáctate con nosotros. En Oceánica te ofrecemos una solución a los problemas de adicciones, con métodos actualizados en el tratamiento para el alcoholismo y otras sustancias, de manera discreta, amable y digna.