logo oceanica horizontal

La Procrastinación

 

Atiendo lo urgente, no lo importante.

 ¿Cuántas veces nos ha pasado que tenemos algún plan muy específico en la vida y lo posponemos hasta que ya es demasiado tarde y después nos lamentamos por no haberlo hecho en el momento que pudo ser posible?, ¿Cuántas veces trabajamos bajo presión debido al acumulamiento de actividades?

Según la Real Academia Española de la Lengua  la procrastinación es una palabra compuesta del latín procrastinarepro, adelante, y crastinus, referente al futuro.

Supone la acción de aplazar, posponer o postergar. Esta acción se define como una costumbre arraigada en muchas personas y culturas de dejar para otro momento o posponer actividades, tareas, trabajos, responsabilidades o deberes que necesitan ser atendidas en un momento determinado, reemplazándolas voluntariamente por otras que son menos importantes pero que tienen un mayor grado de satisfacción inmediata.

Como se dijo anteriormente podríamos ejemplificar situaciones que tengan que ver con la salud al no atender y restarle importancia a síntomas muy específicos  dejando avanzar así una enfermedad de tipo crónico, en el ámbito de lo laboral dejando de lado una responsabilidad muy importante para llegar a una meta por atender otras o enfocarse en muchas tareas a la vez y no avanzar en el objetivo planteado desde un inicio; lo cual en muchas ocasiones puede llegar a comprometer el empleo y productividad dando como resultado implicaciones económicas muy importantes para las empresas.

Diversos estudios han encontrado que comportamientos relacionados con la procrastinación están relacionados con: una baja autoestima, déficit en autoconfianza, creencias irracionales, déficit de auto-control, depresión, comportamientos de desorganización y en algunos casos impulsividad disfuncional y ansiedad.(1)

Como hemos visto el precio que se paga por esta conducta es muy alto a nivel biológico, psicólogico y social, con impactos negativos muy importantes en la calidad de vida.

 

¿Qué hacer?

Existen alternativas para evitar la procrastinación, a continuación se encuentran algunos ejercicios que ayudaran a combatir esta conducta.

 


Ejercicio 1.

Lo más importante es analizar y debatir los pensamientos y sentimientos relacionados con la procrasrtinación.

Algunos ejemplos de pensamientos irracionales o excusas utilizadas para posponer son los siguientes “Lo hago luego”, “mañana veremos”, “eso está muy difícil, lo dejo para después”, “no lo podré realizar bien, mejor luego” o “Cinco minutitos más”. Y algunos sentimientos y emociones ante alguna actividad que es importante son: miedo, angustia, ansiedad y enojo.

 

Complementa con ejemplos personales lo siguiente:

Realiza una lista de los compromisos, objetivos y/o tareas que son importantes.

Realiza una lista de las excusas que pones ante la realización de una tarea importante.

Realiza una lista de los sentimientos o emociones que experimentas ante la tarea a realizar.

Realiza una lista de las actividades que realizas para postergar una tarea importante.

Debate cuál es la consecuencia de procrastinar.

Genera pensamientos alternativos, “fuera excusas”.

 


Ejercicio 2.

Pensamiento irracional o excusa Pensamiento alternativo
“Lo hago luego”

 

Hoy tengo tiempo suficiente, no he generado otro compromiso. Puedo comenzar ya.
“No lo podré realizar bien, mejor luego”

 

Se me complica esta actividad, pediré ayuda y después lo haré yo solo, si me equivoco vuelvo a pedir ayuda, el objetivo es comenzar y terminar.

Ejercicio 3.

Realiza un pasatiempo saludable de preferencia al aire libre a lo largo de tu día, toma algunos minutos a realizar esta actividad, ayudará a relajar tu mente, generará creatividad y oxigenaras tu cerebro. De esta manera tendrás más energía para continuar con tus actividades.

Recuerda que lo más importante es cambiar la forma de pensar y en base a ello practicar una y otra vez hasta lograr reestructurar los pensamientos y ellos modificarán tus conductas.

“Poco a poco se llega lejos”. ¡Ánimo!

 

Referencia:

Quant, M., Sanchez, A. Procrastinación academica: concepto e implicaciones. Revista vanguardia en psicología, Volumen 3, Número 1, abril-septiembre de 2012.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Buscar artículo por categoría

Elige el medio de contacto